Cáncerman

Estaba sentado en la barra del bar, con la mirada perdida.
Tomó un trago de ron y volvió a dejar el vaso. Volvió a coger el vaso, impulsó la mano para beber otro trago, paró a mitad de camino y miró el vaso, como planteándose su vida, pensando si este era el mejor camino. Sin dejar que su cerebro le llevara la contraria, acercó su el vaso a los labios y lo terminó de un trago.
Seguidamente pidió otro.
Iba a beber otra vez cuando vio a alguien entrar por la puerta.
Era Tom, su compañero de trabajo.
Tom se acercó y se sentó a su lado.

-Jo-der, ¿has visto cómo está la camarera? No me extraña que vengas tanto a este bar, Bip.
-Sí...
-¿Qué? ¿Sí? ¿Eso es todo? Me cago en la puta Bip, ¿Vendiste tus huevos para pagar tu boda? Desde que te has casado pareces una niña.
-Oye Tom, hoy no estoy para estas tonterías, ¿Vale?
-Ni hoy ni nunca, esa Liz te está comiendo el coco. ¿Cuánto hace que no te vienes con nosotros? Francis y los chicos están muertos de ganas de que vuelvas a salir con nosotros a liarla un poco.
-Me cago en la puta Tom, te digo que no estoy de humor.
-¿Qué te pasa Bip? ¿Se te ha roto una uña? ¿Se te ha corrido el rímel?
Estás hecho una puta nenaza, desde que nació tu hija estás cada vez más mi...
-Tengo cáncer, Tim, tengo un puto cáncer en el páncreas.

Tom se quedó atónito, callado, con remordimientos por lo antes dicho.

-Joder Bip, lo siento muchísimo.
-No te preocupes tío, no lo sabías...
-Y... ¿Es terminal?
-Sí... es terminal...
-Lo siento, de verdad que lo siento... debe ser duro... ¿Y la quimio, no puedes hacer quimio? He oído que mucha gente se cura, alomej...
-Quimio mis cojones, Tom, quimio mis cojones. Parece que es viejo, está extendido... como mucho conseguiría alargar el sufrimiento.
-Joder, y Sara...

Bip se echó a llorar y se frotó los ojos con las manos.

-Sí, mi hija apenas tiene un mes, y no voy a poder verla crecer.
-Tio, tio... no te preocupes Bip, somos amigos, yo ayudaré a Liz en todo lo que pueda, no te preocupes...
-Gracias Tom...
-De nada Bip, para eso estamos...

Bip se queda otra vez con la mirada perdida, echa otro trago, respira hondo y continúa.

-¿Sabes Tom? Lo que más me jode es no haber tenido huevos... Ahora que sé que voy a morir dentro de poco, es cuando estoy empezando a vivir, porque ya no tengo miedo... y ahora que empiezo a vivir, ahora que puedo ser feliz....
-¿Cuánto te han dado de vida?
-Un mes.
-Caray...

Echa otro trago.

-Tienes razón Tom, la camarera tiene un polvo...
-Ey, es mía cabrón, yo la vi primero. ¡Además, estás casado, hijo de puta!

Soltaron una carcajada.

-No seas egoísta Tom, tengo cáncer, cuando me muera podrás follártela todo lo que quieras.
-¡La vas a contagiar, ella no tiene culpa!
-Eso es el sida -se ríe- me cago en Dios, Tom, a veces pienso que eres retrasado. -Se ríe mucho más fuerte-
-Pedazo de cabrón, ni apunto de morirte dejas de tratarme como a un down. Es como un don, un superpoder que hace sentir subnormal a la gente.
-¿Un superpoder? Debo ser algo así como un super heroe, pero yo sé en que orden vestirme. -
-Cáncerman.
-¡Jajajajajajajajajajajajaja! Me cago en la puta Tom, esa ha sido buena.

Rieron y rieron toda la tarde, y ya, algo más bebidos, empezaron a sincerarse. Cerró el bar, y ellos, borrachos, siguieron hablando en el parking, antes de coger sus respectivos coches.

-Tom, eres un tío de puta madre, confío en ti para que cuides de Liz y de Sara.
-¡Jajajajaja! ¿Podré casarme con Liz y jugar a ser tú?
-¡Claro! Cuando esté muerto me la va a sudar un rato, pero ni se te ocurra tirártela, ten algo de respeto.
-Bueno, jajajajaja, ya me la follé una vez.

Bip borró la sonrisa de su cara y la cambió por una expresión totalmente seria.

-¿Que te la follaste?
-Ey Bip, era broma joder, no te enfades, al fin y al cabo tienes cáncer. -soltó una risotada nerviosa-
-¿Te parece gracioso que tenga cáncer? ¿Te lo parece?
-Tío, se te ha ido la pinza, que era una...
-¿¡Te parece gracioso que me muera, hijo de puta!?
-¡Claro que no, imbécil! ¿Qué pollas te pasa Bip? Estábamos bromeando...
-¡¿Te parece que un tío con cáncer tiene ganas de reírse?! Me cago en dios, ¿te follaste a mi mujer de verdad?
-Tío, has bebido mucho, déjalo, esto no es...
-¡¿Te follaste a mi mujer?! -Saca una pistola de la chaqueta y apunta a Tom-.
-¡Eh, eh, eh! Tío, estábamos de broma, r-relajate.
-Mira tío, no me has hecho gracia en toda la puta tarde, sólo me has tocado los huevos.
-Tío, si te has reído mucho, yo sólo quería ser majo...
-¡¡Bájate los pantalones!! -Haciendo un movimiento con la pistola-
-Tom se cubre asustado- ¡Joder Bip!¡No me apuntes con esa mierda, puedes hacerme daño!
-Bájate los pantalones o te peto un balazo en la frente.

Tom se baja los pantalones.

-Guau Bip, el cáncer se te debe haber extendido al cerebro, vaya puta mierda de poli estás hecho...
-Sigue con el cachondeito y te sodomizo con la puta pistola.
-¿Para qué mierda quieres que me baje los pantalones?
-Porque me atraes mucho, imbécil. Ahora bájate los calzoncillos.
-¡Joder Tim, no soy gay, no voy a dejar que me des porculo!
-¡¡Bájate los calzoncillos de una puta vez o disparo!!
-Vale, vale...

Tom se baja los calzoncillos.

-¿Quieres la puta camiseta también? Toma la puta camiseta, loco de mierda.

Se quita también la camiseta y la lanza.

-¿Y ahora qué?
-Ahora vas a volver a tu casa, andando, y vas a ir gritando ''Miradme, soy retrasado''.
-¡Y una mierda! Tengo aquí el coche, no voy a hacer eso.

Bip dispara a las ruedas del coche, que se deshinchan.

-Y ahora sal y ve a tu casa así, gritando lo retrasado que eres o te hago lo mismo que a tu coche.

Y esa noche, las calles retumbaron con los gritos de ''Soy retrasado'' que hicieron reír a tanta gente.
Y esa noche, Cáncerman hizo justicia.